lunes, 15 de octubre de 2007

El sol comienza a brillar, los pájaros empiezan a canturrear y tus ojos a despertar. Te encuentras en un lugar lejano, tus pensamientos fantasmas invaden tu amanecer para dejar paso al más declive lunes.
Hay que levantarse para ir a trabajar, el jefe espera impaciente que presentes ese trabajo que lleva esperando una semana, y espera que se muy bueno o, sino podrás ir apuntandote a las listas de parados del país.
Si este es tu caso, no te desesperes, piensa que siempre hay personas que están mucho peor que tú, sin trabajo, sin comida, viviendo en la calle o con 3 hijos y una hipoteca de 50 años que tendrán que terminar de pagar sus hijos o sus nietos, o incluso nunca llegarán a pagarla.
Y ahora levántate sin gimotear y sal a realizar tu trabajo mientras lo tengas, y lucha por las cosas que tienes sin llorar por algo que no tiene justificación.
SUSPIROS, SUSURROS Y LÁGRIMAS

El silencio de la noche grita; grita el gemido del cantor; grita la oscuridad del soñador; grita la conciencia que se agita ante el pecado desgarrador.
¿De dónde viene la voz? Pregunta el alma mortificada, escondiendo de todos la cara, ocultando su delito acusador.
Suspiros, susurros y lágrimas elevan al cielo una oración.
Suspiros, susurros y lágrimas delatan un arrepentido corazón.


Pablo Caballero
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Premio Nacional de Poesia

Olvido García Valdés consigue el Premio Nacional de Poesía
La asturiana Olvido García Valdés ha sido galardonada con el Premio Nacional de Poesía por la obra "Y todos estábamos vivos". El premio, otorgado por el Ministerio de Cultura a la mejor obra de poesía publicada en 2006 en español o en algunas de las lenguas cooficiales, está dotado con 15.000 euros.
García Valdés es licenciada en Filología Románica y en Filosofía y al margen de la poesía, su vida profesional se ha vinculado a la docencia, la crítica literaria y la traducción. Además, dirige desde hace un año el Instituto Cervantes en Toulouse.
Su trayectoria profesional comenzó en 1986 con “El tercer jardín” y sus obras han sido traducidas a varios idiomas. En la actualidad es uno de los valores más sólidos de la poesía española.
Según la propia autora, el poemario ganador en "una reflexión sobre el lugar de las mujeres, una conciencia del presente, de la pobreza, de los movimientos migratorios, de las nuevas relaciones que esto conlleva y, como es también muy propio de mis libros anteriores, un diálogo con las otras artes. Es la reflexión estética, la proyección de lo poético en las otras artes".